¡Ocasiones únicas!

Crónica de lo que sucedió en Barcelona a raíz de la presentación de la biografía intelectual del Papa Francisco con su autor, Massimo Borghesi, el periodista Antoni Puigverd y el teólogo Salvador Pié-Ninot
Diego Giordani

Gracias a las presentaciones de los libros publicados últimamente por Ediciones Encuentro, en este último mes hemos tenido la ocasión de tener en Barcelona al astrofísico Marco Bersanelli, que nos ha hablado de su libro El gran espectáculo del cielo, ensayo en el que se expone lo que une a los seres humanos de todo lugar, cultura y tradición desde la prehistoria hasta hoy; y, hace pocos días, al filósofo Massimo Borghesi, que nos ha presentado Jorge Mario Bergoglio, una biografía intelectual.

Después de la introducción del periodista y escritor Antoni Puigverd sobre la importancia de este libro y del deseo del Papa por comunicar con sencillez, Salvador Pié-Ninot describió cómo la teología del pueblo sugerida por el Papa habla de una liberación opuesta al marxismo y cómo la palabra del Papa, que parece ser narrativa o fruto de la espontaneidad, está en realidad influenciada por importantes teólogos como Henri de Lubac, Balthasar o Guardini y cómo la belleza nos lleva a la verdad.

Boghesi nos ha aclarado el motivo por el cual ha decidido escribir este libro después de ataques al Papa muy violentos que no dejan de ser ataques a la Iglesia, en muchos casos incluso desde dentro de la iglesia misma. Nos ha hablado de la concepción polar de Bergoglio y nos ha dicho que no podemos quedarnos y fijarnos solo en un particular sino que necesitamos ideas universales que, como decía Gastón Fessard –que también ha influenciado enormemente el pensamiento de papa Francisco– «lo que es grande se debe demostrar y manifestar en lo que es pequeño», en lo cotidiano.



Oír estas cosas nos ha lanzado y, como nos ha dicho, el cristiano no puede sentarse dado que el tiempo no lo puede ocupar el espacio, que significa que nosotros intervenimos en el mundo comenzando los procesos, luego es Dios mismo que, en el tiempo que Él decide, los cumple. El problema de la Iglesia hoy es la Iglesia misma cuando se clericaliza y se burocratiza perdiendo la dimensión misionera porque dejamos de estar dominados por el estupor de una presencia.
Puedo escuchar estas cosas como algo alejado de mi mundo y de mi vida o puedo decidir dejarme tocar y permitir que me afecten, enriquezcan y cambien mi mentalidad… ¡saldré ganando!

Cuando el movimiento nos propuso participar también en la mesa redonda sobre las fuentes del pensamiento del Papa Francisco en Barcelona me sorprendió el interés que he descubierto en mí que soy empresario, economista y muy alejado de las reflexiones filosóficas o teológicas. Pensaba que ese era un ámbito muy especialista y por ese motivo el acto se realizaba en el seminario de Barcelona, en presencia del rector, con la presentación del periodista Puigvert y con la intervención del teólogo Salvador Pié.
Ya antes de comenzar estaba agradecido por esta curiosidad por conocer de todo, por descubrir que todo me interesa porque todo está lleno de la novedad que he encontrado y sigo encontrando en estos más de 40 años inmerso en el carisma de don Giussani.

Me he dado cuenta también de la necesidad que tengo de participar en encuentros como estos para que todo comentario o juicio personal no nazca solo de mi pensamiento, sino que sea confrontado con quien entre nosotros se dedica con afecto, profesionalidad e inteligencia a la reflexión filosófica y teológica.
Este trabajo suscita, y ha suscitado siempre en mí, matices y movimientos respecto a mi posición inicial; es una posibilidad y una riqueza que siempre se me ha propuesto a lo largo del camino que estoy realizando en el movimiento.