«Tocado por una inesperada alegría»

«¿Tantas personas… tan diferentes entre sí… pero, contentas? ¿De dónde nace la alegría?». Carta de un joven tras la peregrinación de la comunidad de Cataluña al santuario de Montserrat

Este año se nos ha propuesto que peregrinemos a Montserrat, al santuario de la Virgen negra, para rezar juntos el rosario, comer y cantar. Ha sido, sin duda, una peregrinación preciosa: sencilla, muy pertinente. Todos estaban muy disponibles y había un ambiente de comunión increíble. Una propuesta –sin dudarlo– bella, pero por nada del mundo quisiera saltarme el hecho de que todo lo que he vivido no debe darse por descontado.

Es increíble ver cómo estamos juntos, la correspondencia que nace del corazón en cada uno por el hecho de estar de una cierta manera y haciendo las cosas de un determinado modo. ¿Tantas personas… tan diferentes entre sí… pero, contentas? No puedo no preguntarme qué es o quién hace posible este encuentro y esta alegría.



Durante la misma semana, por diferentes motivos, estaba un poco “tocado”, pero a medida que me dejaba “tocar” por lo que estaba sucediendo en Montserrat me descubría más contento. Y, claramente, una vez ya en casa, descubro que estoy lleno de alegría. Es más, he descubierto que no son palabras sino una experiencia. Si alguien me pregunta qué ha sucedido en Montserrat peregrinando con la comunidad de Comunión y Liberación de Cataluña, un fin de semana cualquiera del año, le diré: «ven y verás», no se me ocurre nada más adecuado para explicarle lo que he vivido.
Oriol, Barcelona